Cosas que no debes hacer en Roma

Empezamos fuerte, pero es que esta es muy importante que la tengáis en cuenta. Cuando salgas del aeropuerto vas a ver que hay muchísimos taxis que se ofrecen a llevarte al centro, bueno pues que sepas que son carísimos.

Por un trayecto de unos 30/35 minutos te pueden cobrar literalmente entre 30€ y 60€, y lo más fuerte es que si vas en bus solo tardas unos 10 minutos más y el precio es mil veces más barato.

Hemos hecho una guía completa de como utilizar el transporte en Roma, pero para que lo tengáis en cuenta, la gente suele comprar un billete cada vez que se suben al metro o al bus, y sale mucho más rentable, comprar el bono de 1,3, o 7 días.

Mientas por cada billete individual tendrías que pagar 1,5€, por el de 1 día entero pagarás 6€, por el de 3 días pagarás 16,5€ y por 7 días, que es el que compramos nosotros pagarás 24€…Haz los cálculos tu mismo, pero solo te decimos que Roma tiene muchos sitios, y te evitarás muchas horas de andar si tienes un bono ilimitado que te sirve no solo para metro sino también para bus.

Como en España estamos acostumbrados a tener que validar nuestro billete al subirnos al autobús, cuando viajamos al extranjero y vemos que eso no es necesario, pues la gente decide no comprarlo y jugársela a que no venga ningún revisor.

Los resultados son, que la multa por no tener billete de bus sea de las más comunes en todo Roma… Y ya te podemos decir que no merece la pena.

Tendrás que pagar 50€ (si la pagas en menos de 5 días, sino serán 100) más el precio del billete y una gestión de 3,40€.

Esto es algo que ocurre en todo el mundo, así que seguramente no te sorprenderá, pero en Roma también hay taxis piratas. Esto significa que por un lado son mucho menos seguros, y por otro lado que te pueden cobrar lo que les de la gana. Para evitar subirte en taxis ilegales, simplemente fíjate en que estén registrados y que tengan taxímetro.

Roma es una ciudad en donde casi todo lo importante está en el centro histórico, o sea que, aunque pueda ser grande, siempre tendrás la opción de ir andando, y si no, mucho mejor es ir en bus o metro, pero lo importante es que no alquiles un coche.

La ciudad es un auténtico caos para conducir, la gente conduce de una forma un poco agresiva, y lo peor de todo es que a gran parte del centro histórico, a no ser que seas residente, no podrás acceder. Para colmo, si entras, al haber tantas cámaras, hay muchas posibilidades de que te multen.

A ver tampoco hay que tomarse esto al pie de la letra, porque siempre está guay explorar y descubrir cosas nuevas. Pero, es cierto que Roma al ser una ciudad muy turística tiene muchos restaurantes que son conocidos como “trampas para turistas”, es decir que son lugares que están al lado de los monumentos más visitados, se aprovechan de ese enorme escaparate, y venden comida mediocre a precios altísimos.

Para nosotros la forma más fácil de evitar esto fue leer varias guías de restaurantes recomendados en Roma, apuntárnoslos e ir allí directamente. Hay que tener en cuenta que solo estas unos días en Roma, y no quieres irte sin probar su comida más espectacular.

Esto no lo vas a encontrar en ninguna guía de “cosas que no hacer en Roma” porque es algo que no habíamos leído en ningún sitio, pero si que lo sufrimos personalmente.

Resulta que una de las cosas más típicas en Roma, es ir a los restaurantes de pedir para llevar, y comprar cuadrados de pizza pequeños. Estos te los venden por unos 3€ (de precio si están bastante bien), o te los venden según su peso.

Bueno, pues decirte que, en la mayoría de los locales, estos cuadrados son bastante mediocres. Los venden recalentados, se nota que la masa no es para nada reciente, y en general no es que estuviese muy rico que digamos. Nosotros, personalmente, preferimos pagar más por una pizza típica italiana de las de toda la vida.

Esto ya es algo que pasa en casi todos los países del mundo, tu pides agua y lo que te traen es una botella que suele ser bastante cara. Bueno, pues que sepas que el agua del grifo en Roma es muy buena, así que si quieres ahorrar dinerito no tengas miedo en pedir que no te traigan de botella, sino que te traigan del grifo. Además… ¡Así consumimos menos plásticos!

Esta es una de esas “Cosas que no se pueden hacer en Roma”. Con todo esto de la pandemia, ahora no es que no debas comprar las entradas en la taquilla, sino que en algunos sitios estas obligado a comprarlas online.

Mucha gente va al Coliseo Romano pensando en comprar las entradas allí y en el mismo día, y la realidad es que si haces eso te vas a quedar sin verlo. Porque o no van a quedar, o ni te darán esa opción.

Hay otros sitios como el Castillo de Sant´ Angelo, en donde si podrás comprarlas presencialmente, pero también te recomendamos hacerlo online, porque te evitarás una buena cola.

¡Esto grábatelo a fuego! En Roma, sobre todo si vas en temporada alta, comprar las entradas a falta de 1,2, o 3 días es misión imposible. Nosotros recomendamos comprarlas en cuanto sepas que vas a ir Roma, y así ya te lo dejas todo hecho. Aunque sea las entradas de los monumentos más turísticos.

Hay épocas en las que se ha tenido que reservar para ir al Coliseo Romano con meses de antelación, o sea que tenlo muy en cuenta.

Si vas en temporada baja esto no es tan necesario, y menos en concreto actualmente con esto de la pandemia. Pero aun así ir mirándolo, porque también es cierto que los aforos se han reducido.

En invierno no va a ser ningún problema porque todos vamos abrigados hasta arriba, pero es cierto que Roma en verano es super caluroso, así que es normal que vayamos con manga corta a todos los sitios. Bueno, pues si es así, llévate algo para taparte a la hora de entrar en las iglesias.

En prácticamente en todas las iglesias de Roma, y, sobre todo, en el Vaticano, son super estrictos con eso de no enseñar brazos o piernas. Así que, si no queremos quedarnos sin visitar algún sitio guay, lo mejor es llevar una sudadera o algo que te pueda tapar en una mochilita.

Se que parece sentido común, pero esta es otra de esas cosas que no puedes hacer en Roma, y que no se cómo, pero muchísima gente las hace…Y pagan por ello.

En Plaza de España hay policías pendientes de que nadie se siente en las escalaras, porque antes si se podía y ya no, bueno pues, aun así, la gente se sienta, y que pasa, que primero te avisan y si sigues, luego te multan (Puedes llegar a pagar hasta 200€).

Lo mismo ocurre en la Fontana de Trevi, allí los guardias están para vigilar que nadie se meta en la fuente o que no se apoyen en el borde exterior. Pues igualmente vas a hartarte de oír pitiditos avisando de que no lo hagan.

Todo esto es super básico, pero hay que decirlo porque sigue habiendo multas anuales por cosas de estas.

Esto más que un “Que no hacer en Roma”, es un “Qué hacer en Roma”, y es que en nuestro último viaje a la capital italiana decidimos despertarnos todos los días para ver el amanecer en algún sitio diferente. Lo que conseguimos no fue únicamente ver todo con una luz mucho más bonita, sino ver todo Roma vacío. Es como si fuese una ciudad diferente.

Te imaginas ver el Coliseo para ti solo, o la Fontana de Trevi con apenas 10 personas, bueno pues la única forma de hacerlo es madrugando.

¡Ah! Y por supuesto, para entrar en los distintos monumentos, siempre reserva la primera hora del día.

No nos harás caso, pero te estamos avisando por todos los lados de que en Roma uno se cansa mucho de andar 😂, así que hay que evitar andar a lo tonto. En este caso lo que tienes que hacer es alojarte en un sitio que este más o menos céntrico, y sino quieres pagar mucho, haz como hicimos nosotros que estábamos en un sitio que estaba al lado de una estación de metro.

Agradecerás no tener que añadir otros 15/20 minutos más de ida y de vuelta hasta tu cama.

Aquí ocurre como con los monumentos, si apuras hasta el último día, la cagas. El problema es que, en este caso, el resultado no es que no entres en ese sitio, sino que tengas que pagar un dineral por tus noches allí.

Si puedes reservar con 2 o 3 meses de margen mucho mejor. Te vas a ahorrar mucho dinero, y además evitarás problemas de no encontrar donde quedarte más tarde.

Rosas, pulseras, juguetes para los niños…Estas son algunas de las cosas que los “vendedores callejeros” te van a intentar regalar. Bueno, ni se te ocurra aceptarlas.

Para que entiendas como es la situación, te ponemos el ejemplo de lo que nos pasó a nosotros. Estábamos en el puente del castillo de Sant´Angelo haciendo fotos, y este está lleno de vendedores que nos “regalaban” cosas, y nosotros como ya nos lo sabíamos, les decíamos que no lo queríamos, que muchas gracias. Bueno, pues uno de ellos cogió y nos lanzó las pulseras para que las tuviésemos que coger a la fuerza, y en cuanto se la fuimos a devolver, se nos puso super agresivo, nos llegó a insultar y todo, y la verdad es que lo pasamos fatal.

Al final no ocurrió nada malo, pero ya te hacen pasar un mal rato, y te hacen irte de ese sitio con prisas porque estás incomodo. En el momento que aceptas alguna de sus cosas “gratuitas”, ya van a exigirte que les pagues por ello, así que no caigas en la trampa.

Roma tiene la fama de que allí hay muchísimos carteristas, esta vez, por suerte, no vivimos ninguna experiencia negativa con ello, ni tenemos pruebas de que los haya, pero si es cierto que todo el mundo lo dice.

Para evitar que te puedan robar móvil, cartera, o alguna de tus pertenencias, lleva bolsillos profundos, ponte la mochila delante, y, sobre todo, estate muy atento en lugares concurridos como el metro o los monumentos más famosos.